Eso es lo que les/nos puede suceder si arrancamos la temporada a full sin preparar el cuerpo ni calentar más o menos de manera correcta.
La primera imagen es de la recuperación de una operación de meñiscos (pobre Sergio, se ve que le dolía...). La segunda es una fractura de radio (no sé si AM o FM) y cúbito (tampoco sé si de freezer o congelador). La tercera y última es una fractura de húmero.
Así que ya sabés: cuidate, querete, ojito, ojete. Y no salgan a las pistas sin estar más o menos a tono (blanco, obvio)con las exigencias del esquí o el snowboard.
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